Como resultado de los artículos sobre la falta de talento, ahora parece que el concepto “employer branding” empieza a resonar en la blogosfera. Hace tiempo que este concepto está siendo trabajado por las Grandes Compañías multinacionales (lo oí por primera vez por parte de Charles Hardy, el Responsable de Sistemas de Gestión de Talento de IBM EMEA en el año 2002 en un seminario en Bruselas).
Podemos discutir sobre la buena o mala praxis de las empresas, o si se aplica mucho o poco, pero estos debates son estériles, más propios de la prensa amarilla que de otra cosa. A ver si soy capaz de resumir en un artículo aprovechando lo que he ido escribiendo en los últimos dos años y medio
El mensaje es complejo y debe ser sincero
La marca como empleador (o employer branding, que queda más cool) bien trabajada no puede ser sólo sólo una capa de pintura. Si no se trabaja en bloque, la marca tiene fisuras y pueden llevar al traste el prestigio conseguido. Esta forma de hacer debe respirarse por dentro y por fuera de una Empresa. TODO debe orientarse hacia un modelo diseñado desde la Dirección de la Compañía.
La marca la construyen todos
Debe ser un modelo resonante, que se transmita por todos los poros de la Compañía. Desde las capas más altas hasta las más bajas, todo el mundo debe transmitir eso al entorno. Cualquier interacción que los miembros de la Compañía tengan con el mercado debe transmitir esa imagen: clientes, proveedores, no-clientes y no-proveedores.
En lo que a RRHH se refiere, incluso los potenciales candidatos deben percibir también esa imagen: la forma como tratas a los candidatos es una muestra de la forma como tratas a tus trabajadores. Por ello se debe trabajar muy a fondo las descripciones de las ofertas de empleo, el guión de las cribas telefónicas, las preguntas de las entrevistas, etc. para colaborar en la creación de esa marca.
El mensaje es viral: crea profetas
Hay que tener en cuenta el caracter viral de la comunicación. Una mala experiencia en un proceso de reclutamiento afecta en la decisión de compra de un candidato. Ese mismo candidato explicará esa mala experiencia a sus conocidos… y el mensaje se transmite fuera de nuestro alcance y control. Afortunadamente ocurre lo mismo con las buenas experiencias. Por eso es muy interesante generar buenas experiencias a todos los niveles. Toda la organización debe girar entorno a esa filosofía, para que el mismo mensaje se transmita de la misma manera.
Es por todas estas razones que en los últimos dos años he ido viendo aparecer en el mercado a profesionales con un perfil híbrido entre el marketing y los RRHH, dedicados a la planificación y gestión de la marca global como empleador.
ACTUALIZACIÓN: “El buen rollo, primer factor de fidelidad a la empresa” y “El poder de la marca“. Dos artículos que vienen a complementar lo dicho.
Hola David,
Estoy al 100% de acuerdo con lo que dices del employer branding.
En mi experiencia personal de búsqueda de empleo, muchas veces obtienes una imagen muy equivocada de la empresa a través del anuncio, la charla telefónica o el encuentro personal.
A eso, en mi tierra, se le llama “venderte la moto”; es decir, te cuentan las mil maravillas y luego… bufff
Como a veces le comento a un amigo que se dedica a esto del branding (aunque más a consumo que a otra cosa), ambos vemos que el futuro estará en la creación de una experiencia completa que incluya a empleados, clientes, proveedores y otros stakeholders que digan que por ser de Cocacola, P&G o Mercadona, tienes una serie de valores, ética o llámese X que son propios de la compañía y comparables pero no copiables. Y por supuesto, venderlos como un producto más, como si fuera algo tan tangible como una tableta de chocolate.
No es ninguna tontería, por lo que vivo creo que el próximo área que tiene un futuro por descubrir es el Marketing de Recursos Humanos. No vender el producto, ni al profesional, sino la experiencia de pertenecer a… (rellénese según el caso)
:)
Me encanta tu blog, y no sabes cuánto aprendo de rrhh a través de vuestras opiniones y comentarios
un saludo!
Se me olvidaba decir…
Sé que estas experiencias existen, sobre todo a nivel de multinacionales pero… no están todo lo bien hechas posible.
Hay mucho que trabajar… y creo que es porque lo hacen como una pata más del trabajo de comunicacion.
Y esto no es comunicación, sino algo más extenso.
(Ya no añado nada más :))
Gracias por los piropos, Ana! :-)
interesante todo lo que planteas del employer branding, solo quiero saber la relacion que pueda tener con la empleabilidad y con el nuevo contrato psicologico que estan utilizando las organizaciones.
A qué te refieres con empleabilidad, Álex?
Creo que una parte de ese branding está en el contrato psicológico. Mediante el proceso de creación de ese “employer branding” ya se están sentando las bases de lo que el trabajador va a recibir (no de forma tangible quizás).
Gracias!
D.