Si quieres ahorrar en el negocio de la impresión de Biblias, en lugar de quitarle palabras (verbum Dei!), cambia la tipografía y ahorra tinta.
Hace unos días leí un artículo en el que hablaba que las 150 empresas más grandes del mundo están aumentando su facturación sin aumentar su estructura en la misma proporción. Eso significa que lo consiguen optimizando sus procesos y mejorando el rendimiento de sus trabajadores.
Ante la creciente dificultad de localizar el talento en el mercado, las grandes Compañías han optado por aumentar la productividad por empleado.
Si los procesos eran desastrosos y la productividad por empleado una autentica birria obviamente sería buena idea mejorarlos.
Pero quiero pensar que a estas alturas, despues de tantos años obsesionados con el ahorro , la reducción de gastos y la eliminación del despilfarro, las empresas grandes ya tendrán sus procesos y la productividad razonablemente bien.
¿Se puede seguir mejorando?, obviamente, pero no “hasta el infinito y más allá” . Dedicandose a reducir gastos ¿hasta cuanto puedes mejorar?
Hasta reducirlos del todo hasta que sean CERO, pero antes de llegar ahí te has quedado sin empresa.
Lo que hay que hacer es aumentar el valor, intentar vender mejores biblias para conseguir más cuota de mercado, intentar vender otros libros además de biblias. Y eso es dificil conseguirlo presionando a los trabajadores que lo tienen que conseguir y reduciendo los recursos al mínimo e incluso por debajo del mínimo.
Si aumentas el valor ¿hasta cuanto puedes mejorar? …. Esta vez sí: “Hasta el infinito y más alla”.
Siento discrepar, y comprendo que desde el punto de vista local de recursos humanos el óptimo local se consiga aumentando la productividad de los trabajadores, pero para conseguir el óptimo global de la empresa hay que dejar de una vez de considerar a los recursos humanos como un gasto a reducir y considerarlos como una inversión a cuidar y potenciar.
Estoy de acuerdo en que por el hecho de estar hablando del factor humano, los costes (bottom line humano) no pueden llegar a cero sin que te quedes sin empresa.
Pero… y si esa mejora del rendimiento fuera dada por mejoras en el entorno, en el cuidado de los profesionales, formación en optimización del tiempo, automatización de procesos, minimización de trabajos duplicados, etc?
En ese caso no te cargas la empresa. Pero con esa estrategia sigues teniendo como limite (teórico, en la realidad y si no reduces los gastos de personal, es bastante más pequeño) a lo que puedes mejorar los gastos fijos que tenga la empresa.
No defiendo que haya que despilfarrar, hacer una buena gestión consiste en usar eficientemente tus recursos, pero lo que no me parece en absoluto correcto es considerar la redución de gastos como la estrategia principal. Me parece que es mucho más efectivo (y sin limites al crecimiento) concentrarse en intentar aumentar el valor que generas, aumentar las ventas. Una empresa existe para ganar dinero no para ahorrarlo.
El problema es que el dinero que gastas es visible, fácilmente medible y por tanto es fácil controlarlo; además su control produce resultados inmediatos. Sin embargo el dinero que dejas de ganar es muy dificil de medir y cuantificar; además los esfuerzos en este sentido darán resultado a más medio y largo plazo.
Pero no por el hecho de que sea más fácil y rápido ahorrar que aumentar los ingresos significa que sea más correcto.
Estamos totalmente de acuerdo, Telémaco.
Esa es la diferencia entre la gestión de RRHH estratégica y la no estratégica.